Ana Iribar, viuda de Gregorio Ordóñez, dirigente del PP asesinado por ETA, ha criticado a los terroristas convertidos en pacificadores, en referencia al secretario general de Sortu, Arnaldo Otegi, y ha lamentado que, quienes antes empuñaban las armas, ahora se exhiban impúdicos con la boca llena de paz y las manos sucias de sangre.